Después de un arresto, una persona es llevada a la estación de policía y permanece bajo custodia hasta que pague la fianza o sea liberada bajo su propia responsabilidad. Con la fianza, una persona paga cierta cantidad de dinero (una garantía) para que pueda ser liberada, pero esto sirve como un acuerdo para regresar a la corte en una fecha designada para enfrentar sus cargos. Cuando una persona asiste a todas las audiencias programadas, la fianza se devuelve después de descontar los gastos administrativos. Pero, ¿qué sucede cuando una persona no asiste a la cita judicial?
Esto se conoce como “salto bajo fianza”, o falta de comparecencia ante el tribunal.
Después de que una persona no asista a la cita judicial instruida, la fiscalía emitirá una orden de arresto. Supongamos que la persona que enfrenta los cargos no se presenta en el tribunal en un tiempo razonable o no proporciona al tribunal el motivo de su ausencia. En ese caso, la fiscalía puede presentar un cargo adicional contra el acusado: Falta de comparecencia. Esto puede agregar un delito menor o un delito mayor a la lista de cargos, dependiendo de las acusaciones pendientes.
¿Qué sucede con el dinero de la fianza del acusado después de no comparecer ante el tribunal?
De no presentarse a una cita en el tribunal después de pagar la fianza, el condado se queda con el dinero. Las fianzas pueden alcanzar las seis o siete cifras según el delito y pueden representar una gran pérdida financiera.
¿Cuáles son sus opciones después de no presentarse ante el tribunal?
Las opciones incluyen:
- Reportarse a la cárcel
- Contratar a un abogado para que lo ayude a retirar la orden de arresto por no comparecer y fijar una nueva fecha en la corte.
- Contratar a un abogado para que lo ayude a presentar una moción de entrega en la sala del tribunal (en lugar de en la cárcel) para evitar otra ronda de registros de arresto, huellas dactilares y fotografías policiales.